Comentarios Liberales (LIII)

La bestia progre

FEDERICO JIMENEZ LOSANTOS

10/02/2006

El o la bestia progre, evidentemente de izquierdas, obviamente seguidor de Rubalcaba y su comando desinformativo, que agredió a la señora del PP que recogía firmas en Vallecas para que los españoles podamos opinar sobre el futuro de España, no tiene siquiera la excusa de la juventud. Tampoco la del Alzheimer.Tiene 60 años, lo cual nos debería haber permitido saber su nombre y apellidos, porque no tiene identidad que ocultar y conviene saber cómo se llama ese sujeto, no sea que tropecemos con él, critiquemos a Zapatero o a Polanco y nos corte el cuello. He leído que Acebes va a ocupar el lugar de la mujer a la que apaleó la bestia en la modesta mesa vallecana. Y me parecería bien si antes hubiera publicado el nombre y apellidos de la bestia y su filiación política, que seguramente la tendrá. Como de costumbre, la Derecha no se entera de nada, no aprende y ante lo que no es un paso más sino una evidente vuelta atrás en la criminalización de sus afiliados, como cuando el Prestige y la II Guerra de Irak, ha preferido no dar importancia al hecho, protestar pero poco, quejarse pero menos, adoptar ese «perfil bajo» que acabará llevándolos a la clandestinidad o a Gallardón.

La bestia progre o roja (no confundir con La bestia rosa umbraliana) que atacó a la militante del PP comenzó su agresión gritándole que lo que hacía era «ilegal», es decir, exactamente la misma acusación que Rubalcaba y su cuadrilla han hecho en todas las televisiones contra la recogida de firmas del PP. Luego añadió la cantinela habitual de la tribu bestial, o sea, «fachas, fascistas, hijas de puta», etc. Y ya expuesta su postura filosófica asestó el argumento definitivo: tiró al suelo a la mujer y le dio de puñetazos y patadas, o sea, coces. Qué sacrificada es la vida de estos defensores de la legalidad del PRISOE, párvulos de Rubalcaba y Blanco, devotos de Polanco y ZP: para defender la legalidad no tienen más remedio que vulnerar el Código Penal e incurrir en la violencia de género. La bestia seguramente se hizo daño en los nudillos y en el zapato agrediendo a la señora del PP, pero es que la izquierda heroica es así: no vacila ante el sacrificio.El de la Derecha, naturalmente. Enseguida llegará Cándido a exculparlo. Sin embargo, tal vez Cándido y sin duda Rubalcaba, que ya le llevaría el botijo a Javier Solana, acaso hasta la bestia progre, roja o zurda que coceó en Vallecas a la señora del PP hicieron exactamente lo mismo hace 25 años: recoger firmas para pedir al Gobierno de UCD que, pese a la aprobación en el Parlamento Nacional de la entrada de España en la OTAN, hiciera un referéndum para dar cauce a la inquietud popular sobre este asunto. Seiscientas mil firmas recogió el PSOE y quinientas mil el PCE. Casi tan legales como las del PP contra el descuartizamiento de España. Casi, digo, porque la derecha no cocea.