Comentarios Liberales (XXIV)

COMENTARIOS LIBERALES

By-pass europeo

FEDERICO JIMENEZ LOSANTOS

19/12/2005

Dijeron que volvíamos al corazón de Europa. Lo que nunca explicaron es que el viaje incluía infarto cardíaco, by-pass triple y convalecencia en el pasillo del hospital, tras negarnos el gerente el disfrute de una habitación individual por nuestra condición de FRSA (Futuros Ricos Súbitamente Arruinados). En realidad, nos temimos lo peor cuando el gobierno recurrió a ese sentimentalismo para analfabetos que no siempre excluye de la ignorancia ni de la cursilería a los exhibidores de tan turbia mercancía. Estaba en la línea de publicidad para horteras progres inaugurada por una ministra de Trabajo francesa, naturalmente socialista, con su campaña «Pasión contra el paro». Pero como suele suceder con ZP, el desastre ha superado las peores previsiones. La vuelta al corazón de Europa nos ha dejado en la lista de donantes de órganos antes de que nos hayan trasplantado el que necesitábamos. Antes de esa cumbre presupuestaria de la UE que el Gobierno preparó mandando a Desatinos y Pajín de Calcuta al Africa Negra (precaución insuficiente), el secretario de Estado para la Comunicación aseguró campanudamente que la herencia económica de Aznar en lo que a la Unión Europea se refiere era «de cero euros». Dado que, según la aritmética tradicional, hemos perdido el 85% de lo que España recibió de la UE en los últimos siete años negociados por Aznar, ya nos explicará Moraleda cómo hemos podido pasar tan espectacularmente de la nada a la más absoluta miseria. Porque si perder seis de cada siete euros es un «éxito», como ha proclamado sonriente la vicesargenta del Capitán Kan-Belloch, no quiero ni pensar en el coste de un serio fracaso. Probablemente, ni el acreditado Montilla podría financiarlo.

Todos sabemos que la conjunción de la extraordinaria mejora económica de España en los años de Aznar con la ampliación de la UE a una decena de países víctimas del socialismo real (o sea, arruinados) se traduciría en una disminución de los fondos que ha venido percibiendo España, pero por eso mismo era precisa una política de claridad y consenso por parte del Gobierno nacido del 11-M ( trauma de legitimidad que le acompañará toda la legislatura). Sin embargo, el sectarismo es en ZP como el oxígeno para las plantas. Si no es en esa burbuja cainita de propaganda y autoengaño, no se ve a sí mismo en la función clorofílica de captación de votos. Recurriendo a esa imaginería consensual que tanto apetece el ternurismo popular, ese para el que todo el año es Navidad, ZP compartiría con Rajoy un fracaso similar al de la Constitución Europea. Mintiendo y engañándose, el Gobierno PSC-PSOE ha asumido en solitario un verdadero trafalgar presupuestario donde, según costumbre secular, ha fallado Francia. Creo que ese era el «corazón europeo» al que volvíamos. Era un infarto cantado.